domingo, 14 de septiembre de 2008

Yo soy curiosa, chusma, me encanta escuchar conversaciones ajenas y demás cosas 'insanas' que no tienen sentido. Muchos dirán que es porque soy mujer, pero no. Se equivocan en ese punto porque existen millones de mujeres que realmente les importa un bledo lo que esten hablando en la otra mesa o recrear una historia de que es lo que esta pasando en la puerta del lugar. 

Mi única teoría es que esto se hereda. Y acá no entramos en la forma de crianza, porque nadie le enseña a sus hijos a chusmetear cosas :D... a menos que estes realmente al pedo en la vida... Y digo que se hereda porque hoy me reí mucho mientras fuimos con mi familia a cenar. 

Volvían mamá, Hugh y mis abuelos de un finde de navegación - no recuerdo muy bien donde fueron, pero salieron con el barco a navegar, eso fue lo que entendí -, cuando decidimos que ibamos a comer una pizza al lugar de siempre. Estrategicamente, buscaron un lugar para nosotros 6 (tmb estaba mi hermanito) en la planta superior del lugar. Ubicados en perfecta posición, se podía observar absolutamente todo el lugar desde nuestra mesa, aunque al ir a las 8 de la noche había poca gente. Por suerte, para satisfacer la curiosidad familiar y como es un lugar 'ultra tradicional', se lleno al toque. 

Lo primero fue feo. Una familia repleta de pendejos menores a 6 años se nos sentó al lado. Todos sabemos que el amor por los niños no es una característica familiar, por lo cual se empezo con 'Ay no que bajón, tienen 50 mesas para sentarse y se sientan al lado nuestro...'. Y de ahí en mas, lo que llamo la atención fue otra cosa: que eran una familia muy numerosa. 'Seguro que van a...' (mi hermano y yo mirandonos como wtf).
Cuestión que por un rato dejamos de quejarnos, hasta que se fueron (si, somos lentos en comer, nos tomamos nuestro tiempito) y el hombre se quedo sentado solo en otra mesa para dos. Nose como nos dimos cuenta, creo que tenemos un radar para esas cosas, pero bue, supusimos que era la mujer la que iba a dejar a los chicos y volvía a comer con el marido. ¡Pero no! En ese momento, llego otro nene, este de mayor edad, y se sentó a comer con el. Entonces la conversación giró en tono a 'porque el hombre era tan frío con el nene mas grande y con los demas pendejitos los incitaba a hacer quilombo' (creo que el quilombo fue lo que mas nos molesto... entiendan, estamos grandes!).

Por otro lado, era como que al mismo tiempo me acordaba de como yo no iba a cenar con la mujer de mi viejo cuando recién la conocí - bah, recién, pasaron años creo para que vaya a la casa...-. El trato que tenía yo en ese entonces era tan parecido que me dió cosa por el nene ... nose , fue raro.

Ven, yo empiezo un post gracioso y termina siendo medio tristón... ¡Ufa! 

Bueno :D 


Me despido, no fue tan cómico después de todo, pero... algo es algo! 

2 Comments:

  1. Pedro Molina said...
    Yo herede la nariz de mi padre y los ojos de mi madre...
    Goszko said...
    Yo no se que herede de cada uno, seguro los posibles problemas de salud los herede de mi vieja (diabetes, hipertension, no veo una goma)

    Y de mi viejo espero no haber heredado nada... ah si a los 2 un pelo de una de nuestras cejas crece mas largo que los demas...

    Asique alegrate de haber heredado lo chusma nomas ^^

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